Sincronía

Diciembre 2024

Exposición resultante de la residencia Future Memory Lab en colaboración entre la Fundación Migliorisi y Pyxis Exploration Numérique, con el apoyo de Pro Helvetia. Curaduría de Kira Xonorika. Artistas: Mayeli Villalba (Paraguay), Nico Mierda (Paraguay), Gonzague Rebetez (Suiza), Ilknur Demirkoparan (Suiza), Lucas Lugarinho (Brasil) y Lucila Quillahuaman (Perú). Mentorías a cargo de Walla Capelobo (Brasil), San Joserra (México) y Claudia Casarino (Paraguay).

 

«Sincronía» es la exposición culminante del programa de residencia híbrido Future Memory Lab, el primero con sede en América del Sur que explora la inteligencia artificial (IA). Reuniendo experimentos y trabajos en progreso con la intersección del arte, la ciencia y la tecnología, explora cómo la memoria se articula a través de medios tecnológicos y el potencial de la inteligencia artificial para revitalizar, expandir y reimaginar prácticas artísticas y formas culturales tradicionales mientras mutan, se transforman y se poliniza entre sí.

En IA, la alineación se refiere a garantizar que el comportamiento, los objetivos y los valores de un sistema de IA sean coherentes con las intenciones humanas. «Sincronía» cambia el enfoque hacia un estado de resonancia poética y relacionalidad. A diferencia de la alineación, que implica un ajuste jerárquico, la sintonización invita a una conexión recíproca entre entidades.

Las obras presentadas se inspiran en tecnologías tempranas, como la cerámica y el tejido de ñanduti, mientras que también se comprometen con enfoques decoloniales hacia la computación, el diseño sociotécnico y la neurociencia.

Entendiendo la asimetría crítica en la investigación tecnocientífica que articula la geopolítica en los centros de poder, el papel de los artistas que crean arte en territorios de la mayoría global implica crear nuevas estrategias que abracen las particularidades de su contexto para realizarlas e imaginarlas en futuros alternativos, reconociendo las condiciones de producción y más allá de las limitaciones de la historia oficial y sus predicciones estadísticas.

En su ensayo «La teoría de la bolsa portadora de ficción», la escritora de ciencia ficción estadounidense Ursula K. Le Guin propone expandir el concepto de la tecnología como una bolsa cultural portadora, en lugar de un arma de dominación. Con esto en mente, podemos pensar expansivamente en el ñanduti y en la cerámica, que han servido a propósitos utilitarios para la vida de pueblos anteriores –sus usos potenciales y simbólicos se recontextualizan en estas obras.

La descentralización de la creación y el trabajo con tecnología propone un territorio especulativo como punto de partida para imaginar ecologías mutualistas, donde la inteligencia artificial pueda co-crear una nueva orientación ética. En «El instituto de las inteligencias», la escritora armenia Mashinka Hakopian propone vislumbrar futuros que desmantelen los prejuicios biopolíticos sobre inteligencia, la pluralidad y la subalternización. A través de contribuciones como las de Hakopian y Le Guin comprendemos que la ficción es un método para convocar trayectorias productics, donde los cuerpos-territorios que han sido tácticamente descntralizados del poder podrían ser priorizados.

«Sincronía» propone una proximidad experimental a la IA con un examen crítico, desafiando binarios obsoletos como el tecno-optimismo y el tecno-pesimismo, desinculándola de su uso como herramienta de dominación y abrazando el movimiento coalicional con ella, para preservar y honrar la cultura.

Kira Xonorica
2024